Leí hace mucho tiempo sobre el camino con corazón, al principio no entendí, después creí haber entendido, pero sólo ahora, después de décadas, logro ver su significado.
Cuando damos un abrazo a alguien, pueden suceder varias cosas, una que no sintamos nada, otra que sintamos repulsión, otra que sintamos excitación sexual, y una última que sintamos un profundo y delicado afecto.
Cuando sentimos un profundo y delicado afecto, lo que sentimos es que se abre una abertura en nuestro cuerpo energético a la altura del ombligo, y percibimos como fluye a través de esa abertura nuestra energía, hacia el ser al que abrazamos. Literalmente sentimos mariposas en el estomago, una sensación muy placentera que asociamos al enamoramiento sexual, pero que en realidad tiene un horizonte mas amplio: el enamoramiento espiritual.
Esta sensación del enamoramiento espiritual, no necesariamente se produce con personas: me encontraba cavando una zanja, cuando me dio mucha sed, fui a beber un poco de agua, y cuando regrese había una pequeña viborita dentro de la zanja; ella trataba de salir de la zanja, pero eran demasiado inclinadas las paredes de ésta. Le empecé a decir a la viborita: ¡Sube, sube viborita! mientras colocaba la pala debajo de ella para que no cayera hasta el fondo, ¡sube, sube viborita! gritaba lleno de alegría. Mientras mas subía, mas gritaba y me embargo un júbilo inmenso, y me poseyó un afecto sin limites hacia la viborita, fue un instante mágico, donde el tiempo era muy distinto al normal.
En otra ocasión tuve una discusión muy fuerte con una persona por Internet, nos enemistamos hasta el colmo, nos dijimos de todo. Un día pasó por mi casa cargando a su niño, nos saludamos y le pregunté - ¿es ese tu chaparrito? - y me contesto - si - y le dije al niño - hola chaparrito, ¿como te llamas? - y me dijo su nombre, entonces le dije a mi enemigo - ¡tu chaparrito es muy bonito!, ¡que bonito es! - y mientras le decía esa clase de cosas, me poseyó un afecto sin límites, mis ojos se nublaron bajo la presencia de tan enorme sentimiento, y el niño se vio imbuido de la misma alegría y júbilo que yo, los dos nos habíamos conectado bajo una comunicación espiritual muy intensa, ¡que momento tan sublime y tan inesperado! jajaja.
Seguir el camino con corazón, no significa hacer cosas que nos entretienen, que nos distraen, que nos evaden, que nos hacen sentir seguros, ¡no!, seguir el camino con corazón significa hacer cosas que nos hacen sentir enamorados y entregados, nada de seguridad, nada de esconderse, es entrega absoluta, es afecto sin restricciones, sin límites.